Las vacunas son productos biológicos que tienen o bien trozos de antígeno (vacuna inactivada) o bien cepas de germen no patógenos (vacuna viva atenuada). En ambos casos el objetivo es desencadenar una respuesta humoral (de anticuerpos) que supongan la activación de las defensas del organismo vacunado y que le protegen ante un futuro contacto con un microorganismo patógeno. Los diferentes protocolos de vacunación buscan optimizar la respuesta defensiva del animal.
En el perro las enfermedades infecciosas más frecuentes de las que se disponen vacunas son las siguientes:
- Enfermedades víricas como moquillo, hepatitis vírica, parvovirus, parainfluenza canina y coronavirus.
- Virus de la Rabia. Es obligatorio poner esta vacuna a los perros: la ley indica que todos los perros con más de tres meses deben estar vacunados contra esta enfermedad, si bien el momento de vacunación de rabia suele hacerse antes de los 6 meses de edad.
- Enfermedad bacteriana: leptospirosis y bacterias implicadas en el complejo «tos de las perreras».
- Enfermedades protozoarias: babesiosis o «enfermedad de la garrapata».
En el caso de los cachorros la primera dosis de vacuna de parvovirosis puede ponerse a partir de las 6 semanas de edad. A partir de las 8 semanas se puede vacunar de moquillo, heptatitis y leptospirosis. Estas enfermedades deben de revacunarse cuando el perro tiene alrededor de 3 meses de edad. Suele utilizarse como recordatorio una vacuna polivalente que incluye parvovirus, moquillo, heptatitis vírica, leptospirosis y parainfluenza.
En caso de alto riesgo se puede vacunar contra coronavirus (criaderos, protectoras de animales, colectividades con riesgo, etc).
Si el perro va a ir a una residencia canina, exposición canina o alguna situación de mucho riesgo se puede vacunar contra el «complejo tos de las perreras».
En zonas endémicas, como lo es Burgos, se puede vacunar a partir de los tres meses de la babesiosis o «enfermedad de la garrapata».
La mayoría de estas vacunas requieren revacunación. Lo mejor es dejarse aconsejar por parte tus veterinarios, que te ayudarán a preparar un calendario de vacunación que mejor se adapte a las necesidades de tu perro.